viernes, 31 de mayo de 2013

Resiliencia - Salir adelante a pesar de la adversidad-




Por Abner Huertas


En una hermosa mañana de octubre cuando los niños se preparan desde temprano para alistar su disfraz del día de brujas, Bethany Hamilton decidió ir a la playa Tunnels  en la isla Kauai para practicar surf.

Aquella mañana en que se encontraba recostada sobre tu tabla de surf habían varias tortugas nadando; mientras estaba acostada su brazo izquierdo estaba dentro del agua, cuando de pronto un tiburón tigre se acercó y arrancó su brazo a la altura del hombro.

Sus amigos al ver lo sucedido inmediatamente la sacaron de aquel lugar, siendo apenas las 7:30 de la mañana,  le aplicaron un torniquete y se la llevaron de emergencia al hospital. Había perdido el 60% de su sangre, pero afortunadamente logró sobrevivir ante el ataque del tiburón.

¿Cuál hubiese sido tu actitud ante un evento como este si tú hubieras sido el protagonista? En la vida siempre nos enfrentaremos con adversidades, problemas y situaciones en las cuales sentiremos que estamos hundidos sin poder salir. Situaciones en las cuales creemos que no hay soluciones y permitimos que la ansiedad, la tristeza y en ocasiones extremas llamamos a la muerte para que venga a nosotros para salir de esos momentos adversos.

¿Sabes cuál fue la actitud de Bethany? Tomó la decisión de volver a subirse a una tabla de surf.  En cuestión de semanas estaba de vuelta en las playas surcando las olas; lo que Bethany logró fue sobreponerse ante una situación adversa, encontró una razón por la cual no darse por vencida y luchó para salir adelante, a esto le llamamos… resiliencia.

La resiliencia es la capacidad que tú o yo tenemos para sobreponernos a situaciones difíciles. ¿Alguna vez te has preguntado por qué algunas personas sobrevivieron a los campos de concentración y otras no? Fue porque encontraron una razón para vivir y eso les dio resiliencia.

Increíblemente los que sobrevivieron a esos campos no son los más optimistas los que lograron sobreponerse, sino son los que lograron desarrollar una razón para vivir.  Esto se descubrió en una ocasión que le preguntaron a varias personas que habían logrado sobrevivir a diferentes situaciones dificultosas y ahora viven vidas normales: “¿Quiénes eran los primeros en dejarse morir?” ellos respondieron: “Los más optimistas. Los que sobrevivieron fue porque encontraron una razón para seguir vivos, mientras que los optimistas, en exceso, siempre creían que en una fecha determinada ya estarían fuera del sufrimiento.”

Entonces ¿Qué necesito para sobreponerme ante situaciones adversas?. Viktor Frankl, uno de los sobrevivientes al holocausto, lo resumiría así:

  1. Mantén un diálogo realista y positivo contigo mismo: No es necesario ser un optimista incurable, sino estar consciente de la realidad en la que vives pero decidir ver lo positivo ante la situación y recordarte mismo el porqué eres alguien importante. Ante cualquier situación todos tenemos dos opciones: o nos enfocamos en todo lo negativo o buscamos lo positivo de cada situación por mala que parezca. También recuerda siempre que la única persona que realmente te puede hacer sentir de menos o derrotada eres tú.
  2. Mantén un sueño por el cual vivir: Ten un sueño por el cual luchar. Ante las adversidades recuerda que tienes metas que alcanzar, puede ser escribir un libro, visitar varios países, ayudar a tus padres, construir un albergue para ancianos, en fin pueden ser muchos sueños que hay en tu vida. Si piensas que no tienes un sueño, vuelve a pensarlo, te garantizo que dentro de ti hay muchos sueños que aún no has cumplido. Cuando estés con una situación difícil recuerda también que tienes muchos sueños por los cuales luchar.
  3. Encuentra el sentido de tu vida: El sentido de la vida va más allá inclusive de nuestros propios sueños, pueden estar ligados, pero el sentido es el propósito que tienes para vivir. Tú tienes un propósito que cumplir, las adversidades a pesar que no son agradables sirven en el futuro como experiencia para ayudar a otras personas en la vida. 

En mi vida personal, al igual que en la tuya, he atravesado momentos en los cuales siento que ya no quiero más de la vida. Pero en eso recuerdo que lo primero que debo cuidar es lo que yo me digo a mi. Las personas a tu alrededor te podrán elevar o te podrán socavar, pero el único responsable de permitir que alguien te haga de menos eres tú, cuida lo que te dices. En ese momento sólo puedo recordarme el valor que tengo, los sueños pendientes y que hay un propósito que cumplir.

Quisiera poder decirte que el desarrollar resiliencia es algo sencillo, de unos cuantos pasos o sigue esta receta para que adquieras resiliencia; no es sencillo, pero en la medida en la que decidamos ser personas con resiliencia iremos desarrollando nuestro ser y nos haremos más fuertes.

Cuando hagas frente a una nueva adversidad difícil, recuerda que la resiliencia te ayudará a salir adelante.



jueves, 2 de mayo de 2013

Cinco pasos para el crecimiento personal




Por Abner Huertas

Una de las preguntas que realizo en las charlas que imparto es: “¿Cuántos de los que estamos aquí tenemos algo de nuestra forma de ser que nos gustaría cambiar?”, inmediatamente todas las personas levantan la mano, y la razón principal es porque todos tenemos algo que podemos y debemos cambiar.

Al referirme a cambios en nuestra persona hablo de: nuestro carácter, nuestra personalidad y de nuestro comportamiento, pero mi mayor enfoque siempre es en el carácter debido a que es ahí donde se encuentra nuestro verdadero yo. Una forma muy fácil de detectar áreas de oportunidad de cambio en nuestra vida es pidiendo favor a un amigo de confianza, que sabemos que nos dará una respuesta honesta y sincera de corazón, preguntándole: ¿Qué debilidades ve en nuestro carácter?, realizar este tipo de preguntas requiere madurez de nuestra parte.

En una ocasión realicé una prueba con varias personas que me conocen, les pasé un cuestionario solicitándoles que me dijeran que fallas veían en mi carácter, y el listado con las respuestas llegó a mis manos… y fue un ¡guau ¿todo eso debo cambiar?!,  lo bueno de la vida es que nos da la oportunidad de mejorarnos constantemente si sabemos aceptar que somos seres imperfectos pero que buscamos ser mejores.

Por eso en esta ocasión quiero compartir contigo cinco pasos para el crecimiento personal, así es, sólo cinco pasos fáciles que al final dirás: “Empezaré a cambiar muchas cosas en mi vida desde este momento.”

Antes de empezar, primero debes definir qué quieres cambiar, esto es priorizar, enfócate en una o dos áreas donde sabes que necesitas mejorar; para empezar, podría ser: tu actitud, el enojo, la pereza, la disciplina para hacer ejercicio, en fin, tú escoge. Lo segundo que quiero tengas claro es que la única persona con la que debes comparar tus logros es contigo mismo; evita la tentación de compararte con los demás, tú debes ser mejor de lo que tú fuiste ayer, nada más y nada menos.

Dicho lo anterior, empecemos a aprender los pasos para el crecimiento personal.

Paso #01: Identifica el objetivo
El primer paso es saber por qué quieres hacer el cambio. Es identificar cuál es el objetivo de realizar este cambio en tu vida.  En palabras de Stephen Covey esto es iniciar con el fin en mente.

Siempre existe una razón para el cambio, si hablamos de la actitud tu objetivo puede ser: “Crear un ambiente más saludable a través de mostrar una buena actitud”. Esto le da una perspectiva positiva a algo que por naturaleza puede ser negativa.

El objetivo debe ser de una frase que la puedas recordar fácilmente. Siempre escribe en positivo y proyecta tu ser en la forma en la que anhelas convertirte.

Identifica tu objetivo, cuando sepas el porqué debes hacer el cambio programas tu mente para ejecutar los siguientes pasos en el crecimiento personal.

Paso #02: Define tu realidad
¿Cuál es la realidad actual de lo que quieres cambiar?, dime si no es cierto pero a veces tendemos a excusarnos del por qué actuamos como actuamos a pesar que sabemos que no debemos actuar de determinada manera. Por eso es importante que sepamos dónde estamos parados.

Lo primero que hicimos fue definir el objetivo, eso nos dio la dirección que debemos tomar. La realidad nos dice en dónde estamos “parados”  para que a partir de este punto podamos tomar la dirección correcta.

Cuando definas tu realidad debes ser totalmente honesto contigo mismo, puedes decir algo como: “Siempre que alguien no está de acuerdo conmigo tiendo a mostrar una mala actitud y aunque sepa que la otra persona está en lo correcto me pongo en contra por el simple hecho de querer estar en contra.”. Como puedes ver la realidad nos abre los ojos para detectar qué es lo que estamos haciendo. Ahora ya sabemos a dónde vamos y dónde estamos… pero ¿qué obstáculos se nos pueden atravesar?

Paso #03: Identifica los obstáculos y encuentra opciones
Ya sabemos a dónde vamos y dónde estamos, y como todo en la vida siempre encontraremos obstáculos. ¿Cuáles son los obstáculos que te impiden crecer?, el obstáculo principal siempre seremos nosotros, pero debemos hilar fino para encontrar cuales son los patrones que nos llevan a comportarnos de forma negativa o incorrecta.

Un obstáculo podría ser: “Siempre que veo a ‘x’ persona naturalmente me pongo en forma defensiva por lo que me dice”.  El obstáculo tiene relación con la realidad, pero acá buscamos el disparador, en este caso, de la mala actitud.  Si una persona o evento es el obstáculo entonces debemos encontrar opciones de comportamiento, una opción podría ser: “Cada vez que vea a ‘x’ persona sonreiré y pensaré en las cualidades positivas de ella.”, ¿Ves?, identificamos un obstáculo pero al mismo tiempo identificamos una opción para sobrellevar ese obstáculo.

Ya identificados tus obstáculos y tus opciones… hay que establecer un plan.

Paso #04: Sigue un plan de acción
En este punto ya sabes a dónde quieres llegar, dónde estás y qué obstáculos y opciones tienes. Ahora ¿qué harás?, el plan es un análisis introspectivo de cuáles deben ser los pasos que tú como ser individual debes realizar para alcanzar tu objetivo.

En este plan debes considerar cambiar hábitos; estos nos hacen e influyen en la forma de comportarnos. Establece un plan que te permita cambiarlos. Hazte preguntas cómo (en el caso de cambio de actitud, si es algo diferente cambia la palabra ‘actitud’ por lo que deseas cambiar): ¿Qué puedo hacer para que esta actitud sea positiva?, Si fuera la persona con la mejor actitud del mundo ¿Cómo me comportaría?, ¿Qué hacen las personas con mejor actitud?

Estas preguntas te ayudarán a establecer los pasos a seguir para el cambio, pero el plan no puede estar solo, también necesita ser gestionado.

Paso #05: Gestiona el cambio
¡Listo!, ya tienes tu plan, ahora es momento que gestiones esa decisión de cambio. Establece fechas, da seguimiento y mantenimiento a los cambios que estás ejerciendo en tu vida.

Muchas veces nos quedamos con la intención de cambiar y no seguimos porque no gestionamos esa decisión. Nuestra naturaleza nos hará querer regresar hacia esos antiguos comportamientos, por eso debemos ser constantes y darle mantenimiento a estas decisiones.

Puedes llevar un registro donde anotes tus éxitos y fracasos en el cambio, no importa si llevas más fracasos que éxitos, con el tiempo y la dedicación se dará la vuelta y comenzarás a tener más éxitos que fracasos porque estarás creciendo.

Conclusión
El crecimiento personal es intencional. Para crecer establece el objetivo, tu realidad, tus obstáculos y opciones, sigue un plan de acción y por sobre todo gestiona el cambio para que sea duradero.